El tenista británico tuvo una serie de desafortunadas actitudes ante el árbitro en su derrota en la última fase de la Qualy del Masters de Miami.
Lejos de ser castigado o descalificado por sus repetidas e insistentes faltas de respeto hacia el Umpire, Dan Evans fue premiado con el ingreso al cuadro principal del torneo como lucky loser debido a la baja de último momento de Tomás Berdych
El tenista británico se retiró de la pista muy enojado con el árbitro brasilero Rafael Maia, calificando su actuación como «una mie… de show».
Durante el partido Evans recibió un punto de penalización por golpear una botella de agua con su raqueta durante un cambio de lado, salpicando a todos a su alrededor y también anteriormente había sido sancionado por una obscenidad audible.
Evans más tarde catalogó como arrogante al árbitro por no asumir errores que tuvo en el transcurso del partido. «Él me dijo que fue un buen partido cuando obviamente no lo fue. No me importa si el admite sus errores, todos los cometemos. Pero que quede claro que no fue un gran partido por parte de él».
Reconocido como el chico malo en sus tierras, Dan Evans gracias a la nueva regla del prize money no obtendrá mayor ganancia por haber ingresado al cuadro, pero en caso de vencer a Malek Jaziri en primera ronda ganará no menos de 10 mil dólares. Nada mal para un tenista el cual debería agradecer por no haber sido descalificado por sus dichos.