Entrevista exclusiva con el platense en el Argentina Open a días de dos piedras en su camino a la hora de representar a su país, que no le impidieron destacarse bajo el agobiante calor del Buenos Aires Lawn Tennis Club
Tomás Etcheverry (82° del mundo) avanza en el ATP 250 de Buenos Aires luego de un comienzo de año con muy buenas y algunas malas. Obtuvo su primer triunfo en el cuadro principal de un Gran Slam, pero luego se perdió su participación estreno en la Copa Davis por una lesión en la espalda. Más allá de que se encuentra recuperado, arrastró esa seguidilla negativa en Córdoba. Pero aprendió a dejarla atrás.
-¿Ya te sentís un jugador ATP?
-Sí, la verdad que sí. Cuando jugás estos torneos, elevás el nivel automáticamente.
-Se te notó golpeado después de la derrota en Córdoba (ante Joao Sousa por 6-3, 6-7 [5], 6-4), porque se escapó una buena chance. ¿Cómo hiciste para cambiar el chip tan rápido?
-Es tenis, de eso se trata: salir adelante, porque si nos quedamos con la frustración es difícil pasar de página. Obviamente, ese día estaba muy golpeado. Cada semana tenemos una oportunidad de hacerlo mejor, fue un gran partido que no pude cerrar.
-En el Abierto de Australia ganaste tu primer partido de Grand Slam. ¿Por qué significa tanto esa victoria?
-Siempre el primero es el más importante y el que queda en tu recuerdo. Tenía esa espina, porque el año pasado había hecho cuatro primeras ronda. Ganar por primera vez en ATP 250, en Challenger… Es una alegría extra.
-Después de ganarle a Gregoire Barrere (71°) te tocó con Jannik Sinner (14°). ¿Qué diferencia sentiste entre un Top 50 y un Top 20/10?
-Te das cuenta por qué están ahí. Me cagó a palos, pero también te llevás un montón de cosas. Decís: “Che, qué bien hace esto, lo otro”. Está bueno enfrentarlos. Terminé frustrado porque pensé que le iba a hacer un poco más de fuerza, pero la verdad es que tuvo un partido excelente. Me sirvió para darme cuenta de que hay muchas cosas para laburar.
A principios de este mes, Argentina cayó por 3-1 ante Finlandia por los Qualifiers 2023 de la Copa Davis. El platense había sido convocado por el capitán, Guillermo Coria, pero debió bajarse por una lesión en la espalda. Su lugar fue ocupado por Facundo Bagnis, que debió salir a la cancha en el cuarto punto luego de la lesión de Francisco Cerúndolo.
–¿Te quedaste con la espina de no poder estar en Finlandia?
–Sí, la realidad es que sí. Quería estar. Me había avisado Guille que estaba convocado; me mandó un video súper lindo y le dije que tenía pendiente una resonancia porque arrastraba un dolor grande en la espalda (tomó medicamentos para jugar en el Australia). No sabía qué tenía, me dolía un montón y no sacaba en los entrenamientos. Tenía que descartar que sea alguna otra cosa grave y encima se venía una gira en Sudamérica que representa mucho. Tampoco quería ir a Finlandia sin estar al 100% y perjudicar al equipo. Terminé golpeado porque la primera convocatoria es la más linda y un sueño.