A 2 años de su último partido en Queen´s, saciamos esa necesidad de verlo con recopilaciones de sus mejores tiros.


Su tenis es tan especial, que hasta el jugador más consagrado se sintió débil jugando contra él. Del Potro puede jugar el tiro más violento, el globo más preciso o el toque más exquisito. Puede atacar y defender. Por esas virtudes, su tenis es único.

Esa sensación de superioridad y de fragilidad al mismo tiempo hicieron que del Potro sea el jugador que más victorias ha acumulado contra el Big 4 (grupo que reúne a los cuatro mejores jugadores de las últimas dos décadas): venció siete veces a Roger Federer, seis a Rafael Nadal, cuatro Novak Djokovic y tres a Andy Murray. Pero, ¿por qué nos gusta tanto? ¿Será por esa derecha? Seguramente, si la quisiéramos reproducir terminaríamos jugando fuera del club… O porque Delpo representa al talento en estado brutal. Al superhéroe, al tipo que puede pegarle más fuerte a la pelota de todo el mundo. Como si algún Dios del Olimpo le hubiera entregado ese don.

Así como Ferrer se llamó el #1 de los terrenales, del Potro lo es de los inalcanzables; es enorme, por su potencia y su carisma. En un tenis que se pone cada vez más monótono, el propone vértigo.

No se cuándo lo volveremos a ver. Tampoco hay certezas de su recuperación. Pero lo extrañamos simplemente porque es Del Potro.