Cuando Estados Unidos ponía las reglas del tenis.


Antes de que el mundo se globalizara. Antes de que internet fuera parte de nuestra vida. La principal potencia del mundo, Estados Unidos llegó a tener a cinco de los diez mejores jugadores del mundo. Una nueva generación de jóvenes que tendrían la difícil misión de dejar en el olvido a estrellas como Jimmy Connors o John Mc.Enroe.

El primer adelantado fue Andre Agassi, que ganaría su primer ATP con 17 años, y vencería al mismísimo Connors en el UsOpen. Conseguiría tres finales de Grand Slam con 21 años. Su primer grande llegaría a los 22 en Wimbledon, luego de que lo hicieran Chang, Sampras y Courier. Llego al #1 del mundo en 1995. Y aunque es el único jugador hasta el día de hoy en ganar los siete torneos más importantes del tenis, se esperaba mucho más de él. Gano 8 títulos y perdió 7 finales de Grand Slam, pero su legado tal vez sea más importante que sus números.

Michael Chang, fue el campeón más joven de Roland Garros con 17 años. Su mejor posición fue #2 del mundo y a lo largo de su carrera jugó tres finales de Grand Slam más que perdió. Creció bajo la sombra de sus contemporáneos, pero no por eso su carrera fue menos importante. Se quedó afuera del mejor equipo de Copa Davis siendo #4 del mundo en 1992, aunque ganaría la Copa Davis con su país en 1990.

Solamente un jugador de esa generación pudo alcanzar una final de Grand Slam por afuera de Agassi, Courier, Sampras y Chang. Su nombre es Mali Vai Washington. No llegó al Top-10, pero estuvo cerca (#11 en 1992). Se dio el gusto de jugar la final de Wimbledon de 1996. David Wheaton y Aaron Krickstein también fueron protagonistas del circuito por esos años. Llegaron a disputar semifinales de Grand Slams, pero tener tan buenos compañeros generacionales, hicieron que sus carreras se opaquen un poco.

Cuando todo parecía que la cima del ranking se disputaría entre Stefan Edberg, Boris Becker y André Agassi, apareció en escena Jim Courier. Fue el primer americano del grupo que llegó al #1 del mundo (1992), gano 4 grandes y perdió otras 4 finales. Un jugador físico, que reunía lo mejor de tenis americano y una influencia muy marcada de lo que sería la escuela española moderna.

El camino de Todd Martin fue inverso a sus prematuros colegas, apareció con fuerza en el circuito luego de su paso por la Universidad en 1993. En su palmarés se destacan las dos finales de Grand Slam (Us. Open y Australia Open) y la Copa Davis formando pareja con Pete Sampras. Su mejor ranking fue #4.

 

El líder de esta generación fue sin dudas Pete Sampras. Ganó el UsOpen a los 19 años, y después de algunos años de vaivenes, llegó al #1 del mundo en 1993, posición que no abandonaría hasta el año 2000 a pesar de algunas interrupciones. Sus 14 Gran Slams parecían inalcanzables hasta la aparición de Roger Federer.  No pudo con Roland Garros, pero fue la marca de una generación prácticamente invencible.