A raíz del conflicto armado en Ucrania la ITF suspende a Rusia y Bielorrusia obligando a los jugadores a participar sin bandera.


Una nueva polémica se enciende en el mundo del tenis, luego de que la ITF suspendiera a los equipos de Rusia y Bielorrusia y que obligara a los jugadores de dichos países a competir «sin bandera» o bandera neutral.

El punta pie inicial lo dio Elena Svitolina que declaró públicamente: «Creo que la situación actual requiere una clara posición de nuestras organizaciones: la ATP, la WTA y la ITF. Los deportistas ucranianos hemos pedido que siguieran las recomendaciones del COI de aceptar a deportistas de Rusia o Bielorussia solo como atletas neutrales, sin poder mostrar sus símbolos nacionales, colores, banderas o himnos». «No estoy culpando a ningún deportista de Rusia, no son los responsables de la invasión de nuestra querida patria. Es más, quiero dar las gracias a todos los jugadores, especialmente de Rusia y Bielorrusia, que han apoyado firmemente nuestra posición en contra de la guerra. Su apoyo es esencial».

Elena Svitolina y su firme posición de no jugar contra jugadoras que representen a Rusia y Bielorrusia.

Las federaciones y asociaciones que regulan el llamado deporte blanco en el mundo siguen el ejemplos de organismos deportivos, que han excluido de otras disciplinas como el fútbol, automovilismo, torneos del llamado ciclo olímpico entre otros, es decir, UEFA, FIFA y el Comité Olímpico Internacional (COI)ya se han pronunciado en torno al conflicto armado provocado por Rusia contra Ucrania.

¿Ahora puede la ITF despojar a un jugador de su bandera? ¿Los tenistas representan a sus estados o a las federaciones de tenis de sus estados? ¿Tienen responsabilidades sobre las decisiones militares de sus gobiernos?.

Parece que la solución fue más políticamente correcta, que una solución fundada. Hasta ahora ningún jugador se ha manifestado estar a favor de la invasión Rusa sobre Ucrania. Y es preciso aclarar que ser ruso o bielorruso no implica estar a favor de actos gubernamentales de sus estados. También es cierto los jugadores de tenis, no son soldados que cumplen ordenes de sus respectivos gobiernos, son seres libres, con un derecho adquirido que es hacer uso de su nacionalidad. Negarles participar bajo sus colores no hace más que censurar parte de la identidad de esos jugadores.

Es cierto que este boicot deportivo es una continuación de las series de medidas que fueron adoptadas por los países de la OTAN para frenar el avance de las tropas Rusas en Ucrania. ¿Pero son aplicables al tenis?. La polémica está abierta. Pero cuando los jugadores pongan la pelota en juego será muy difícil tapar una bandera con un trapo blanco.